Fue un auténtico caos. La sesión de clasificación del GP de Brasil se aplazó a la mañana de este domingo por la fuerte lluvia que cayó el sábado. Y a las 7.30h locales, los pilotos de F1 desayunaron Fórmula 1 en su estado más puro, con una clasificación contra el crono en una pista mojada, aunque ya sin charcos, pero muy delicada, que fue el mejor escenario para una clasificación apasionante, loca, con hasta 5 banderas rojas, en la que Lando Norris logró la pole de forma magistral.
Y así, el Mundial se pone al rojo vivo: Verstappen tendrá que salir 17º en la carrera de hoy (16.30h). Se metió en un enorme problema por culpa de una bandera roja que le perjudicó en Q2.
En ella, Fernando Alonso volvió a hacer magia con uno de los peores coches de la parrilla, metiéndose en Q3 de forma milagrosa, supliendo las carencias de su monoplaza con sus manos, teniendo que tomar más riesgos en busca de un resultado impensable en seco. Estaba pilotando al filo de la navaja con un coche con poco agarre y, en pleno milagro, se fue contra el muro. Saldrá en la carrera de hoy (16.30h) en el 9º puesto con el 9º o 10º peor coche de 10 totales. Queda todo dicho.
El gran triunfador fue Lando Norris, que logró una pole importantísima que puede acercarle y mucho a un título que parecía casi perdido para él ante Verstappen. El británico ha sumado demasiados errores este curso y parecía tener el Mundial muy complicado. Arrancaba el Gran Premio a 47 puntos y ganar la carrera sprint le dejaba a 44 puntos de Max antes de la carrera de hoy, con otros 3 Grandes Premios por disputarse ante un Verstappen que no fallaba. Y en mojado, en una ‘qualy’ en la que era muy fácil engordar su larga lista de fallos, el inglés estuvo inmenso. Pasó por los pelos a Q2, en el 15º puesto, pero a partir de ahí, desde que la pista estuvo para intermedios, el británico voló en Q3 con vueltas sensacionales.
Lando Norris aprovechó así una enorme oportunidad para meterle un enorme golpe en el Mundial a Max Verstappen en la carrera de hoy, siempre que se pueda competir, ya que la probabilidad de lluvia es elevada.
Su gran rival por el título, el líder del Mundial y actual tricampeón de la F1, Max Verstappen se vio perjudicado por una bandera roja en Q2 que le dejó fuera. El neerlandés se vio perjudicado por una normativa incomprensible. Max estaba en la parte intermedia del circuito, en plena vuelta lanzada para meterse en Q3, cuando Lance Stroll se chocó en las primeras curvas. Max no iba a encontrarse jamásel coche verde, pero al mostrarse la bandera roja, estuviera donde estuviese, tenía que levantar el pie y abortar su giro. Se quedó así con la miel en los labios, en el 12º puesto. Eso, sumado a los 5 puestos de sanción que arrastraba por cambio de motor de combustión interno, le hará salir 17º en una carrera en mojado en la que puede pasar absolutamente de todo. Max es un mago bajo la lluvia y no hay que descartarte nunca, y más en una carrera en mojado en la que puede haber accidentes y coches de seguridad que le beneficien. Pero tendrá que arriesgar con su máximo oponente en la pole. Si Norris gana y Max no puntúa, rebajaría su desventaja con Max hasta los 19 puntos a falta de 3 Grandes Premios. Hay Mundial. Pero depende y mucho de lo que pase hoy.
