Nikola Jokic tiene una misión y está más que listo para ella. Por mucho que no lo parezca, el serbio quiere volver a repetir título de la NBA y ya está preparado para liderar una vez más a los Denver Nuggets. Jokic se fue hasta los 25 puntos, 14 rebotes y 8 asistencias en tan solo 28 minutos para liderar la victoria de los suyos ante los Clippers por 90-103. Como si de lo más fácil se tratara, Jokic hizo su trabajo y se sentó al banquillo: un día más en la oficina.
Como también viene siendo costumbre en él, Jokic firmó esos números con una eficiencia espectacular (9/15 en tiros de campo, incluyendo un 3/6 en triples, y un 4/5 en tiros libres) y fue parte indispensable de las mejores jugadas de sus Nuggets, vigentes campeones de la NBA.
A pesar de llegar al descanso con empate en el marcador (53-53), los de Colorado no tuvieron problemas en imponerse a un equipo que jugó sin sus grandes estrellas. Ni Kawhi Leonard ni Paul George estuvieron en el partido, por lo que Bones Hyland tuvo que multiplicarse, pero sus 25 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias fueron en vano y encima tuvo que abandonar la pista antes de tiempo por un esguince en el tobillo.