Sin LeBron James ni Luka Doncic, Austin Reaves tomó el mando y protagonizó una noche inolvidable. El escolta de los Lakers anotó 51 puntos, su récord personal, además de sumar 11 rebotes y 9 asistencias, para guiar la victoria por 127-120 ante los Kings de Sacramento.
Reaves encestó 12 de 22 tiros de campo, con seis triples —incluido el número 500 de su carrera—, y convirtió cuatro tiros libres decisivos en los últimos 32 segundos del partido. Con esta actuación, se convirtió en el cuarto jugador en los últimos 40 años en registrar al menos 50 puntos, 11 rebotes y 9 asistencias en un mismo juego, junto a Doncic, Russell Westbrook y James Harden.
El último jugador de los Lakers en alcanzar esas cifras había sido Elgin Baylor el 13 de febrero de 1963, cuando firmó 50 puntos, 15 rebotes y 11 asistencias ante los Boston Celtics. Más de seis décadas después, Reaves igualó esa hazaña con una actuación que quedará en la historia de la franquicia angelina.
Además del brillante desempeño del escolta, DeAndre Ayton aportó 22 puntos y 15 rebotes, mientras que Rui Hachimura sumó 18 unidades.
Los Lakers afrontaron el duelo con un panorama complicado por las bajas de sus dos estrellas. Luka Doncic fue descartado antes del juego por una lesión en el dedo de la mano izquierda y una contusión en la pierna, y será reevaluado en una semana. En tanto, LeBron James sigue fuera por una ciática que lo mantendrá alejado de las canchas al menos hasta mediados de noviembre.
Por el lado de Sacramento, Zach LaVine lideró a su equipo con 32 puntos, acompañado por DeMar DeRozan (21) y Domantas Sabonis (10 puntos y 14 rebotes). Dennis Schroder también destacó con 18 unidades y 12 asistencias, aunque no pudo evitar la caída ante un Reaves imparable.
Con este triunfo, los Lakers siguen sumando confianza en una temporada marcada por las lesiones de sus figuras, pero iluminada por la irrupción estelar de Austin Reaves.
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