Un imparable Luka Doncic volvió a demostrar por qué es uno de los jugadores más dominantes de la NBA. Con una actuación magistral de 48 puntos, 11 rebotes y 8 asistencias, el esloveno fue la gran figura en la victoria de Los Angeles Lakers por 128-110 ante los Minnesota Timberwolves.

El astro europeo rompió su propio récord de anotación en temporada regular con la camiseta angelina, firmando una de las mejores marcas individuales en la historia de la franquicia.

Doncic impuso su dominio desde el arranque: en apenas 18 minutos ya llevaba 32 puntos, exhibiendo una precisión letal (16 de 29 en tiros de campo) y un liderazgo absoluto. Su energía contrastó con la caída en el debut ante los Golden State Warriors, donde pese a ser el máximo anotador, los Lakers no habían logrado imponerse.

Sin LeBron James —ausente por un problema de ciática—, Doncic encontró apoyo en Austin Reaves, quien brilló con 25 puntos, 11 asistencias y 7 rebotes, y en Rui Hachimura, decisivo en el tercer cuarto con 23 puntos y una efectividad del 77% en tiros de campo.

En el otro costado, Anthony Edwards fue el máximo anotador de los Wolves con 31 puntos, acompañado por Julius Randle (26). Sin embargo, la defensa visitante no logró contener a un Doncic encendido, que llevó a su equipo a cerrar el primer cuarto arriba 25-21 y mantener la ventaja hasta el final.

El tercer cuarto marcó el quiebre definitivo del encuentro: los Lakers se mostraron más compactos y precisos, alcanzando una diferencia máxima de 14 puntos y cerrando el parcial 108-94. Desde ahí, el dominio angelino fue total.

Esta victoria significó una revancha muy esperada para los Lakers, que en los últimos playoffs habían caído ante los Timberwolves, dejando heridas abiertas. Con esta actuación, Doncic deja en claro que busca escribir una nueva era dorada en Los Ángeles.

DIARIO DEPORTIVO — diariodeportivo.com.ar