21 April, 2025

El Calamar igualó 1-1 con el Tomba en el Estadio Único de San Nicolás y se impuso en una extensa tanda desde los doce pasos para meterse en la definición, donde enfrentará a Rosario Central. El Millonario y el Canalla empataron 0-0 en Córdoba y los de Demichelis no pudieron meter ni un solo tiro desde los doce pasos; Broun atajó tres y los de Russo festejaron por 2-0.

Platense hizo historia, derrotó 6-5 en los penales a Godoy Cruz tras igualar 1-1 en los noventa minutos en el Estadio Único de San Nicolás y se clasificó a la gran final de la Copa de la Liga Profesional 2023, donde se medirá con Rosario Central, que eliminó a River. Ronaldo Martínez abrió el marcador para el Calamar y Salomón Rodríguez lo igualó para el Tomba para llevar el encuentro a la definición desde los doce pasos, donde Ramiro Macagno emergió como héroe.

El duelo comenzó entretenido, con pocas llegadas pero de ida y vuelta. Los de Daniel Oldrá tuvieron la primera clara con un disparo de Tadeo Allende que se fue apenas al lado del palo, pero los de Martín Palermo fueron los que rompieron el cero apenas pasado el cuarto de hora de juego, con un buen desborde por izquierda y un centro bajo para la aparición en soledad de Ronaldo Martínez, que la empujó y abrió el marcador.

Sobre la media hora de partido, los mendocinos reaccionaron y llegaron al empate gracias al oportunismo de Salomón Rodríguez, que capturó un rebote tras una pelota parada y la desvió para establecer la igualdad. A partir de ahí, el duelo se torno aburrido, con mucho nerviosismo, patadas, amarillas y muy poco fútbol. Apenas un remate de Nicolás Castro que controló bien el Ruso Rodríguez.

Fue final 1-1 y el finalista debió definirse en la definición por penales, donde se ejecutaron veinte remates, diez por equipo, y Ramiro Macagno atajó cuatro para consagrarse como la gran figura de Platense, que se impuso 6-5 y se metió en la gran final.

Rosario Central, finalista de la Copa de la Liga tras superar a River por penales

Rosario Central logró este sábado superar a River por penales por 2-0 tras empatar sin goles en el tiempo regular y se convirtió en finalista de la Copa de la Liga Profesional en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba. Ahora, irá por el título ante Platense, que más temprano superó por la misma vía a Godoy Cruz.

El primer tiempo se jugó con intensidad y dientes apretados, y cuando los espacios comenzaron a aparecer fue el conjunto de Martín Demichelis el que los aprovechó con mejor pericia. Promediando la etapa consiguió amenazar con un cabezazo de Sebastián Boselli, y después Nicolás De la Cruz -que tuvo a todos los Millonarios en vilo al mostrarse con molestias en el aductor desde antes del inicio- obligó al esfuerzo a Jorge Broun. Cerca del descanso, Ezequiel Barco metió un tiro libre bombeado al travesaño cuando todos esperaban el centro, pero el cero no se movía.

El complemento tuvo un planteo más claro con el Millonario proponiendo y el Canalla parado de contra, y no por eso menos peligroso. Merodeó La Banda sin generar peligro real, y Jaminton Campaz terminó sacudiendo la modorra al exigir a Franco Armani. Demichelis buscó renovar el equipo con cambios, como el ingreso del Diablito Echeverri y Pity Martínez, y antes de salir De la Cruz lo tuvo con un tiro apenas alto. Después, Enzo Pérez también dejó su lugar con una molestia en el gemelo. En el final, aunque algo desdibujado, estuvo más cerca River con un disparo de lejos de Boselli que desvió Broun.

Tras el tiempo adicionado, la definición por penales se hizo inevitable. Jorge Broun arrancó derecho tapándole el suyo a Enzo Díaz, pero siguió encendido ante Agustín Palavecino y el Pity Martínez. Armani le atajó el segundo a Campaz y comenzaron los cuartos tiros 2-0 arriba gracias a los tantos canallas de Maximiliano Lovera e Ignacio Malcorra. Con la responsabilidad de convertir o despedirse, Manuel Lanzini lanzó el suyo a las nubes y toda la fiesta fue rosarina. Final de año para un River que se quedó sin resto en estas instancias y continuidad del sueño de Central, a un partido de la gloria.