
Los Chicago Bulls y Zach LaVine pasar por el peor momento de su relación. Entre rumores crecientes sobre su posible traspaso, la franquicia y la estrella han seguido dejando evidencias notables del enfriamiento del matrimonio. La última polémica tuvo como protagonista al escolta y una empleada del equipo de comunicación, que intentó parar al jugador para una entrevista postpartido con la televisión que él rechazó.
La situación fue “gestionada internamente”, apuntó Billy Donovan, entrenador del equipo, antes de la derrota anoche contra los Miami Heat por 100-118. Fue el sábado contra los floridenses, precisamente, cuando LaVine se fue directo al vestuario tras una victoria por 102-97, negando con la cabeza y apartando la mano de la trabajador de relaciones públicas de la franquicia. “Fue un malentendido”, se limitó a comentar el protagonista de las últimas semanas en Chicago.
LaVine encadena dos partidos lanzando menos de 10 veces a canasta, un dato inédito para él en muchos años. Tras la derrota de anoche, el jugador volvió a dejar comentarios pasivo-agresivos. “No hemos estado 20-1 abajo en este partido, así que eso es positivo”, ironizó. Anoche solo anotó 13 puntos en la derrota contra Miami.
La semana pasada, LaVine reconoció que se siente frustrado por el mal arranque de los Bulls esta campaña, pero no quiso responder a ninguna de las preguntas relacionadas con un hipotético traspaso. El equipo es ahora mismo duodécimo en el Este con un balance de 5-10, y dentro de la organización también hay cierto descontento con la actitud del jugador.
“Mi deseo es que todo el mundo se ayude entre sí para hacer su trabajo”, disparó Donovan para zanjar la polémica entre la encargada de prensa y su jugador. El entrenador está visiblemente molesto con LaVine, aunque no verbaliza esa incomodidad más allá de su lenguaje corporal ante la prensa.
Las últimas novedades sobre el interés que despierta el jugador apuntan a los Sacramento Kings como posible postor. Los Lakers, Heat y 76ers también han sido mencionados por medios como The Athletic y ESPN.
Fuente: Mundo Deportivo