15 May, 2025

Paolo Banchero no está haciendo demasiado ruido mediático pero sigue firme en su camino hacia el estrellato de la NBA. El ala-pívot de segundo año, mejor novato del curso pasado y una de las piezas destacadas del Team USA en el pasado mundial, se sacó un canastón de la manga anoche para aupar a los Orlando Magic en casa de los Chicago Bulls por 94-96.

El interior de 21 años recibió un balón en la banda izquierda con 7,5 segundos por disputarse y se trasladó a trompicones al centro de la zona, donde ejecutó un maravilloso un giro de 180 grados para anotar la suspensión ganadora con 1,4 segundos por disputarse. En el United Center, la casa que construyó Jordan, el talento de los Magic se disfrazó de Michael. La foto tiene sus reminiscencias.

Jamahl Mosley, entrenador del portento, explicaba en verano que Banchero es “una combinación de Carmelo Anthony, LeBron James y Jayson Tatum”. Casi nada. “El juego cambia y los jugadores son tienen más talento e inteligencia. Ahora son combinaciones de varias cosas”, añadía el preparador.

Banchero ha dado un salto notable en este inicio de curso, donde está siendo más eficiente en el tiro y además está subiendo su aporte en la distribución de juego de unos Magic que por fin compiten (6-5). El interior promedia 18,9 puntos, 6,8 rebotes y 5,1 asistencias con un 46,5% de acierto en tiros de campo y un 38,7% en triples.

Anoche, por cierto, superó con 17 puntos y 9 rebotes el reto de Zach LaVine, que enchufó dos triples consecutivos para empatar en los compases finales del encuentro en medio de los rumores que le sitúan en la puerta de salida de Chicago. El teórico referente de los Bulls finalizó con 19 puntos (6-16 TC) en un encuentro donde no jugó por lesión DeMar DeRozan.


Fuente: Mundo Deportivo