No es un torneo más. No, no es un Master más. El Madrid Master de World Padel Tour se ha erigido como una cita única en la última temporada del caminar de este circuito y hasta los más rebeldes no quieren pasar desapercibidos en un escenario que quedará para la posteridad.
Porque contra toda lógica, contra el ranking, los octavos de final iban a premiar la valentía, el ímpetu y lo no establecido. Rompiendo la tónica general del statu quo tres parejas del top-8 caerían con estrépito en la jornada del jueves. Otras tantas sufrirían y de qué forma.
Una jornada que dibujaría unos cuartos de final anómalos y contra pronóstico que ya avisan de lo que está por venir. Hay favoritos, sí, pero todo puede pasar.
Sanyo y Agustín Gutiérrez remontan a Galán y Lebrón
El partido del día se ubicaría en la central. Mediada la tarde y en el penúltimo turno se enfrentaban tres números uno. Ale Galán y Juan Lebrón ante Sanyo Gutiérrez y, sí, su sobrino Agustín que juega y muy bien al pádel. Un duelo por experiencia desmedido que se iría equilibrando por la vía de la fe.
Y es que en el primer set los ex números uno lograrían hacer valer una rotura de ventaja para encarrilar el partido y dar un paso de gigante hacia lo que parecía sería una victoria en la normalidad de lo establecido. Pero nada es normal cuando hay un Gutiérrez en pista. Ni qué decir tiene con dos.
El segundo parcial iría demostrando que cuando se cree y se trabaja, se puede. Vaya si se puede. Sanyo se pondría el partido a la espalda para en su versión más ofensiva, pegado a la red, condicionar el juego y Oveja, que de bóvido solo tiene el nombre, acompañaría a su gran referente con la regularidad que venía demostrando no hace pocos meses.
En el desempate, en ese instante donde se definen más que partidos, igualarían el encuentro. Pero, no contentos con ello, volverían a golpear en el tercero a unos tocados Galán y Lebrón a los que cuando se pone cuesta arriba les cuesta más mantener la compostura.
Con un juego en blanco y el definitivo 4-6, 7-6 y 6-4 la pareja argentina dejaba en el camino a una de las parejas aspirantes y la imagen de Agustín celebrando y Sanyo mirando a la grada, quieto, casi inerte, definía a la perfección la hazaña lograda.
Diestro y Leal cortocircuitan a Tello y Ruiz
Diestro y Leal durante el partido.WPT
Hazaña más terrenal, pero no de menor mérito, que también conseguirían Javi Leal y José García Diestro eliminando a la pareja cinco del torneo, Álex Ruiz y Juan Tello.
Tras un primer set ajustado que definiría la pareja hispanoargentina en el desempate, los españoles encontrarían en la regularidad y la paciencia la estructura de juego necesaria para forzar la versión más volátil de sus rivales.
Sendos breaks marcarían la diferencia en un partido igualado, pero de tendencia cambiante y que premiaría a una dupla que en escenarios lentos donde cuesta empujar la pelota tiene más argumentos que la pegada (6-7, 6-3 y 6-4).
Lucho y Maxi continúan su idilio con Madrid
Maxi Sánchez frente a Yanguas.
Argumentos que exhiben con orgullo en la capital Maxi Sánchez y Lucho Capra. Lo hicieron en verano en el P1 y, claro, cómo dejar pasar la ocasión ante la última vez de WPT en Madrid.
La pareja nueve, sólida, compacta y con un plan de juego claro, dominaría con rotundidad a unos Yanguas y Belasteguín que no lograrían en ningún momento encontrar su mejor versión y que pagarían las desconexiones.
El 6-3 y 6-2 clasificaba a la dupla argentina a cuartos de final que avisa, y seriamente, que lo ocurrido en Madrid la última vez no fue solo una cuestión de suerte.
Fuente: Mundo Deportivo
